En marzo de 1966, cuatro meses antes de que arrancara el Mundial de Inglaterra, se robaron el trofeo Jules Rimet. En medio de la desesperación, una mascota la encontró durante un paseo con su dueño.
Se trata del trofeo más valioso de fútbol y uno de los más cotizados de todos los deportes. Por eso, cada vez que sale de visita a algún lugar, se toman todas las precauciones necesarias para protegerlo. Sin embargo, las medidas de seguridad a veces pueden fallar, tal como ocurrió aquel 20 de marzo de 1966 con la Copa del Mundo en Londres.
Ese domingo, Inglaterra quedó conmocionada con la noticia del robo del trofeo Jules Rimet, el premio que se le otorgó a los campeones de los Mundiales entre Uruguay 1930 y México 1970.
A falta de cuatro meses para el inicio de la competencia, había desaparecido la gran estrella. Con el correr de los días, aumentaba la desesperación y caían las esperanzas de recuperarla. Encima, la prensa comenzó a reproducir lo sucedido.
Cómo fue el robo del trofeo Jules Rimet en Inglaterra 1966
La FIFA accedió a una solicitud para exhibir la copa en el Methodist Central Hall de Westminster, un lugar de usos múltiples de Londres, utilizado principalmente como iglesia metodista y centro de conferencias.
A cambio, la entidad madre del fútbol pidió que el trofeo estuviera custodiado las 24 horas y asegurado por 30 mil libras. Pero algo falló. Hubo un descuido entre los encargados de la seguridad, lo que permitió que un hombre ingresara con tranquilidad y se llevara el objeto preciado.
Según reveló el periódico británico Daily Mirror en 2018, el nombre del ladrón era Sidney Cugullene y realizó este acto por diversión: aprovechó una desatención entre los guardias y solo necesitó romper un pequeño candado para dar con su objetivo.
Desde que se conoció el hecho, las autoridades recibieron varios llamados con información sobre el paradero del trofeo en los que pedían importantes sumas de dinero por su rescate. Sin embargo, eran pistas falsas.
Pickles, el perro que encontró la copa y se transformó en héroe
Pasaron nueve días eternos hasta que finalmente lograron recuperar la copa. El héroe fue Pickles, un perro que salió a pasear con su dueño, David Corbett, y encontró aquel objeto del que hablaba toda Inglaterra.
Según reveló el propio Corbett, ambos se dirigían hacia una cabina telefónica para hacer un llamado, cuando el perro dio con un paquete y empezó a olfatearlo con mucha curiosidad. “El trofeo estaba envuelto en papeles de periódico y fuertemente atado con cuerda, apoyado contra la rueda del auto de mi vecino”, contó en alguna oportunidad durante una entrevista con el sitio de la FIFA.
Y agregó: “Por entonces, el IRA (Ejército Republicano Irlandés) andaba suelto, así que pensé que era una bomba y lo dejé en el suelo. Lo levanté, lo volví a dejar. Entonces, la curiosidad me pudo. Rompí un poco el envoltorio por debajo y había una chapa lisa. Seguí rompiendo alrededor, y aparecieron Brasil, Alemania, Uruguay. Volví a casa corriendo y le dije a mi mujer: ‘¡Creo que encontré la Copa Mundial!’”.
Al llevarlo a la comisaría, se topó con una situación que hasta el momento no imaginaba: fue catalogado como el sospechoso número 1 del robo, algo que se corrigió con el correr de los días luego de los interrogatorios.
Pickles, el perro del año y estrella de cine
Una vez que lograron salir del lugar de acusados, David Corbett y su mascota fueron reconocidos como héroes: recibieron una recompensa económica, realizaron entrevistas a los distintos medios de comunicación y participaron de muchos eventos -entre ellos, los festejos por el campeonato logrado por Inglaterra en ese Mundial-.
Pickles fue destacado como “perro del año”, recibió una medalla y comida gratis por todo ese 1966. Como broche de oro, participó como extra de la película “El espía de la nariz fría”, que se proyectó en cines.
En 1967, Pickles murió y fue enterrado en el jardín de la casa de Corbett, en South Norwood. Su popularidad fue tan grande que hasta el día de la fecha, cuando se acerca la época de un Mundial, su nombre vuelve a salir a la luz.
Del trofeo Jules Rimet a la actual Copa del Mundo
Desde el Mundial de Uruguay 1930 hasta la fecha, se usaron dos versiones del trofeo.
La primera versión, originalmente llamada Victoria, fue creada por Abel Lafleur y se usó a partir de Uruguay 1930 hasta México 1970. Cambió de nombre oficialmente en 1946: le pusieron Jules Rimet en honor al entonces presidente de la FIFA, uno de los responsables de la creación de la competencia.
En 1970, Brasil quedó en posesión del trofeo por haber conseguido por tercera vez el campeonato y se realizó la nueva versión de la Copa del Mundo, diseñada por Silvio Gazzaniga la cual se utiliza desde Alemania 1974 hasta la actualidad.
Fuente: Denis Gerchkovich - Tn.com.ar