Cada 30 de agosto se celebra el Día Internacional del Puma, fecha designada para reconocer la importancia de la conservación y cuidado de una especie emblemática de América y de importancia central en el funcionamiento de los ecosistemas naturales.
El puma, león de montaña o león americano (Nombre científico: Puma concolor) es el segundo felino más grande de América, luego del yaguareté, y el cuarto más grande del mundo después del tigre, león y yaguareté. Es el de mayor distribución de América, encontrándose desde Alaska hasta el sur continental de Argentina y Chile.
De acuerdo con el registro fósil, los pumas evolucionaron hace unos 6 millones de años en Norteamérica. En Sudamérica, el puma encontró́ una amplia gama de nuevos ambientes y presas a los cuales se adaptó́ exitosamente. Es así́ como este gran depredador logró colonizar desde los altos Andes, hasta las selvas tropicales, pasando por los grandes pastizales de la llanura pampeana, los bosques áridos del gran chaco y la extensa estepa patagónica.
El puma ocupa más territorio que cualquier otro animal silvestre terrestre en América. Su territorio abarca 110 grados de latitud, desde el norte del Yukón en Canadá al sur de Los Andes.
Su amplia distribución se debe a su capacidad de adaptación a casi todo tipo de hábitat: se encuentra en todos los tipos de bosques, así como en las tierras bajas y desiertos montañosos.
Los estudios muestran que el puma prefiere las regiones con vegetación densa, pero puede vivir con poca vegetación en zonas abiertas. Su hábitat preferido son cañones, escarpes, terrenos rocosos y la selva densa.
La Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza y los Recursos Naturales (UICN), ubica al puma en todos los países de Centroamérica y de Sudamérica.
La población total de pumas se estima en menos de 50.000, según cifras de la UICN, con una tendencia descendente.
El 30 de agosto se celebra el Día Mundial del Puma, instaurado desde el año 2017 en conmemoración del incendio que en 2009 arrasó con la Reserva de flora y fauna Pumakawa (Villa Rumipal, Valle de Calamuchita, Córdoba, Argentina), donde se alojaban nueve ejemplares. Cuando las llamas alcanzaron el sector de habitáculos Kai Pacha, la responsable de la reserva, decidió liberarlos. Dejarlos encerrados hubiera significado una muerte asegurada, y abrirles la puerta principal ponía en riesgo a los vecinos voluntarios que intentaban apagar las llamas. Sin embargo, los pumas la siguieron y la rodearon mansamente, sin que se registrara ningún incidente.
El puma es el emblema de Pumakawa, donde cada año se trabaja para llegar al Día Internacional del Puma con acciones concretas en defensa de la especie.
Este año han profundizado sus esfuerzos:
- Contra el mascotismo del puma y otras especies autóctonas.
- En el campo: con campañas para que no se extraigan las crías de pumas encontradas durante la cosecha.
- Junto a los productores: para minimizar el daño y evitar la muerte de los pumas que atacan el ganado.
- Para que se cierren los criaderos de pumas para cacería en cotos de caza.
- En búsqueda de la prohibición de la importación de trofeos de caza de las especies más amenazadas y reducir el papel de Argentina en esta crueldad.
Fuente: VetMarketPortal.com.ar